¿Qué consideramos una mejora?
Vamos a considerar una mejora cualquier cambio que se produzca en la empresa que reduzca la exigencia física de los trabajadores, y por tanto, reducirá el riesgo de desarrollar trastornos musculoesqueléticos.
Tipos de mejoras
Las mejoras que realizar pueden ser:
- Organizativas: Son modificaciones en cómo se organiza el trabajo entre los trabajadores.
- Técnicas: Son modificaciones físicas del entorno de trabajo, substituyendo, modificando o adquiriendo máquinas, herramientas, equipos, mobiliario, espacios, etc.
- Formativas: Acciones de formación, concienciación y de cambio cultural dirigidas a mejorar la aptitud ante el trabajo, utilizando el cuerpo de la forma óptima.
Mejoras en función del problema
Para que las acciones de cambio que se desarrollen en la empresa sean eficaces en la reducción del riesgo, deben mejorar uno o varios factores de riesgo presentes de forma importante en el puesto de trabajo.
La intuición y la percepción pueden fallar. Tendemos a prestar mayor importancia a las operaciones laborales que sean más exigentes, aunque se realicen por muy poco tiempo. Algunas veces, puede ser más prioritario reducir la exigencia sobre una tarea más ligera porque se realiza durante más tiempo.
Por lo tanto, las mejoras a realizar variarán en función de la realidad laboral de un puesto de trabajo concreto.
A continuación, se describen posibles mejoras que se pueden llegar a realizar en un puesto de trabajo en función de los peligros a los que se está expuesto:
